Las pasiones de la vida
Son «la savia de la vida»

«La pasión está considerada algo políticamente incorrecto», manifiesta el periodista Fèlix Riera en el libro ‘Las pasiones según Rafael Argullol’, una traslación al lenguaje escrito de las conversaciones que ambos mantuvieron en Catalunya Ràdio y Ràdio Estel. El programa radiofónico partía de la premisa de abordar, en cada encuentro, una pasión diferente que Rafael, ensayista y catedrático de universidad, no conocía hasta el inicio de la charla; los diálogos se extendieron durante tres años y medio. Así, el libro plasma sus palabras en torno a esas treinta y cuatro pasiones diferentes (amor, arte, curiosidad, muerte, etc.) durante casi quinientas páginas de extensión. La obra reflexiona sobre algunos de los temas más trascendentales de la existencia humana para definir el concepto de «pasión».
A pesar de que las pasiones tienden a aceptarse en áreas triviales, como las aficiones, también existe la concepción de que, una vez abandonada la juventud, debemos centrarnos en los elementos más racionales y funcionales de la edad adulta. Sin embargo, alguien apasionado por lo que conoce, lo que aprende o lo que desea descubrir es alguien vivo. Como indica Argullol: «En ausencia de pasiones caemos en la apatía y en la indiferencia». Rodearse de gente ávida por compartir, descubrir y dialogar sobre lo que les apasiona es un estímulo vital extremadamente atractivo. Aunque sea en «terrenos inofensivos» (el coleccionismo, la jardinería, el deporte, etc.) no deberíamos alejarnos de aquello que nutre nuestra motivación al margen de juicios externos. Las pasiones son «la savia de la vida».
Publidado en Heraldo de Aragón el 24 de diciembre de 2024